INCUBADORA
Es uno de esos términos súper gráficos que definen algo: las incubadoras de empresas son lugares donde las startups “echan a andar”. No solo proporcionan unas instalaciones profesionales para liberarte del quedarte en casa en pijama todo el día frente al ordenador, sino que es una especie de asesoría que ayuda a los emprendedores a descubrir su propio proyecto y les da la orientación y recursos necesarios para poder despegar su idea con éxito.
Actualmente ya se habla de varias fases de incubación: pre-incubación (antes de lanzarse al mercado), incubación propiamente dicha (fase de desarrollo del plan de negocio y su seguimiento) y post-incubación (fase en la que se facilita la mejora continua).
Si quieres hacer uso de sus servicios te aconsejamos que prepares tu pitch, ya que debido a la alta demanda, para entrar probablemente necesitarás preparar un plan de negocio que hable de la viabilidad de tu idea (tanto en términos técnicos como económicos, sin olvidarte de presentar a los miembros de tu equipo).
En cualquier caso estar en una incubadora o tener mentores puede ser la diferencia entre despegar o no tu proyecto; tendrás más posibilidades de que tu pollito crezca.
Además de las incubadoras también existen las llamadas aceleradoras, que son el paso posterior.