[vc_row][vc_column][vc_column_text]
“Nadie tenía esa mezcla de arrogancia, humildad, talento y presencia que tenía Steve Jobs”.
“Cambió la música, cambió el cine, cambió los ordenadores un par de veces. Creó industrias que no creíamos necesitar”.
Con estas declaraciones comienza Billion Dollar Hippy, el documental de la BBC (que puedes encontrar en Netflix) sobre Steve Jobs que cuenta, a través de los hitos de Apple, la vida del visionario que logró revolucionar el mundo de la informática gracias a los cambios que aplicó a sus productos, teniendo en cuenta su background algo alternativo.
Se ha hablado mucho del fundador de Apple, un referente para millones de personas por su particular forma de pensar y de comunicar. Gracias a este documental es posible adentrarte en la vida de Jobs y sus compañeros e inspirarte en las diversas circunstancias que se presentarán a lo largo de tu carrera.
No importa cómo empiezas, importa cómo acabas
Steve Jobs llevó a Apple de un garaje en un barrio residencial a la supremacía global. Nunca fue una compañía convencional. Nació en los años 70 en California gracias a los dos mundos que rodeaban a Jobs: el mundo Hippie y el de los ordenadores.
A pesar de los comienzos, algo complicados, Jobs nunca dudó del impacto que tendrían sus innovaciones en la tecnología. En 1976 Wozniak y Jobs empezaron a vender el Apple I, un ordenador fabricado por el primero, del que tenían que vender al menos 50 unidades para recuperar el dinero invertido.
El Apple II salió a la venta en 1977, y fue el primer ordenador doméstico con gráficos a color, lo que llevó a la compañía a la cima del éxito. A finales de 1980 la compañía ya valía dos mil millones de dólares. En 1981 IBM lanzó su ataque al Apple II con IBM PC. Esta guerra duraría 15 años en los que tuvieron que reinventarse, porque quedaron relegados a un segundo plano.
A día de hoy, la compañía ha crecido exponencialmente y sus ingresos en el último trimestre de 2017 fueron 88.300 millones de dólares.
Ten el propósito de cambiar el mundo
Inspirado por la contracultura, Jobs creía firmemente en la remodelación de la sociedad desde la base. “Siempre tuvo la ambición de cambiar el mundo y esperaba conseguirlo dándole poder a la gente”, señala Stewart Brand. Como señala Simon Sinek en sus charlas sobre liderazgo, “poner el propósito en primer plano lo cambia todo”.
“Steve me miró y me dijo: ¿Quieres vender agua azucarada el resto de tu vida o prefieres venir conmigo y cambiar el mundo?” explica Sculley, por entonces CEO de Pepsi.
Cuando las cosas se complicaron por la guerra abierta con IBM, Jobs no perdió las ganas, por el contrario, convenció a John Sculley, por entonces CEO de Pepsi, para que dejara todo y aceptara un cargo al mando de la compañía. “Steve me miró y me dijo: ¿Quieres vender agua azucarada el resto de tu vida o prefieres venir conmigo y cambiar el mundo?” explica Sculley. Y, ¿quién se resiste a una proposición así?
[/vc_column_text][/vc_column][/vc_row][vc_row css=».vc_custom_1598433056081{background-color: #ffffff !important;}» el_id=»form-descargas»][vc_column][vc_column_text]
[/vc_column_text][/vc_column][/vc_row][vc_row][vc_column][vc_column_text]
Sé fiel a tus valores
Steve Jobs abandonó pronto la universidad, como comenta Daniel Kottke: “Nos compramos Be Here Now, un libro nuevo sobre el viaje a la India de Baba Ram Dass. Nos encantó a ambos y se convirtió en la base de nuestra amistad”. A Steve no le interesaba las posesiones, no le interesaba el dinero. Le interesaban las cosas en las que creía.
Esto le llevó a creer en sí mismo y a no dudar de sus principios, ni siquiera en el momento en el que prescindieron de él en Apple, o las guerras abiertas con el resto de compañías. Sabía que, si era fiel a sí mismo, tarde o temprano las aguas volverían a su cauce. Jobs reconocía que, lo único que le mantuvo a flote en los momentos difíciles fue el amor por lo que hacía.
Nunca tires la toalla
Aunque los expertos se preguntaban el por qué del lanzamiento de un nuevo ordenador, estando el de IBM, que era perfecto, Jobs contestaba: “La gente querrá tener el nuestro”. A pesar de su precio (más de 1000 dólares por encima del IBM), Jobs estaba seguro que triunfaría. Las cifras de ventas fueron desastrosas. Esto llevó a una discusión entre Jobs y Sculley. Fue el momento en que Jobs fue expulsado de la empresa que él mismo había creado.
11 años más tarde, seguía arrastrando ese hecho. Dejó de lado a Apple, ya que no quería que la empresa tuviera éxito sin él y se dedicó a hacer otras cosas. Entre otras, invirtió 50 millones de dólares en Pixar, lo que hizo que se convirtiera en billonario.
En este punto Microsoft era la empresa de referencia, el 90% de los ordenadores americanos le pertenecían. En su nueva empresa, Next, Jobs había diseñado un poderoso sistema operativo. Justo lo que necesitaba Apple en ese momento, ya que no podía competir con Microsoft. Apple compró Next por 400 millones de dólares.
“Stay hungry. Stay foolish” Steve Jobs
Además de los grandes hitos tecnológicos de Jobs, algo que marcó su vida pública y que se ha convertido en una referencia, fue el discurso que dio en la Universidad de Stanford a los alumnos que se acababan de graduar. Además de contarles anécdotas de su vida, compartió con ellos una de las grandes lecciones que había aprendido a lo largo de los años:
“Vuestro tiempo es limitado, así que no lo gastéis viviendo la vida de otro.
No os dejéis atrapar por el dogma que es vivir según los resultados del pensamiento de otro.
No dejéis que el ruido de las opiniones de los demás ahoguen vuestra propia voz interior.
Y lo más importante, no perdáis el coraje de seguir a vuestro corazón y a vuestra intuición”.
[/vc_column_text][/vc_column][/vc_row]
Deja una respuesta