Llega agosto, el mes de vacaciones por definición, y con él la eterna duda del emprendedor: “¿me voy de vacaciones o ni siquiera me lo planteo?”

¿Cómo lo hacen los magnates famosos y cómo lo podemos hacer los emprendedores “mortales”? Te lo contamos a continuación, con consejos incluidos sobre cómo irte y no morir a tu regreso.

Empresarios famosos y sus vacaciones

Los grandes empresarios españoles suelen desconectar cerca de sus raíces, como es el caso de Amancio Ortega, que descansaba en la playa de Sanxenxo en Pontevedra, o el de Ana Patricia Botín, a quien le gusta hacer trekking por la Vega de Pas o disfrutar de playas menos conocidas para los turistas en Cantabria, sin dejar de disfrutar de su estación alpina favorita en Suiza. 

Los empresarios más conocidos a nivel mundial como Zuckerberg, Gates o Bezos disfrutan de parajes tan dispares como Hawai, Cerdeña en yate o Roma respectivamente.

Y Richard Branson, que compró la paradisíaca isla caribeña de Necker Island (Islas Vírgenes Británicas) no solo la alquila a famosos y gente que se pueda permitir gastar la friolera de 49.000€ la noche, sino que también la disfruta e incluso trabaja desde allí.

Él mismo aboga por la importancia de las vacaciones como un derecho fundamental para los trabajadores, y es bien conocido que ha implantado una política de vacaciones ilimitadas en alguna de sus compañías.

En vez de plantearte dónde pasar tus vacaciones, diseña una vida de la que no necesites escapar. Seth Godin

Elon Musk es el ejemplo contrario: no se va de vacaciones nunca (no se tomó unas durante al menos doce años), pero no porque no necesitara cambiar de aires, sino por mala suerte (o coincidencia de eventos): la primera vez, estando en PayPal, fue reemplazado por Peter Thiel; la segunda estuvo a punto de morir a causa de una malaria, y durante la tercera, uno de sus cohetes explotó.

¿Habría dejado de explotar el cohete si él no se hubiera ido de vacaciones? Probablemente no, pero seguro que las consecuencias de gestionar el “después” del incidente interrumpieron su descanso… Por eso es difícil verle disfrutando de períodos de asueto.

 

vacaciones Elon Musk

 

¿Esto quiere decir que a todos los emprendedores les vaya a salir mal irse de vacaciones? Definitivamente no. 

De hecho hay empresas de viaje especializadas en diseñar las mejores vacaciones específicas para emprendedores. Es decir, si hay negocio es porque existe esa necesidad, y aunque suena a leyenda urbana, sí, hay empresarios que se van de vacaciones con éxito. 

Por eso vamos a “bajar” al mundo real y ver la situación de los emprendedores. 

 

Bajar al mundo real: estrés y burnout en España

burnout y estrés laboral

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Dirías que es una buena nota, ¿no? Depende de lo que se esté evaluando.

Y es que el síndrome de burnout o trabajador «quemado», aunque no esté incluido en la RAE, es una realidad.

Si hablamos de estrés laboral, no es algo positivo. Y es que los españoles somos unos “empollones” del estrés: según la última encuesta del INE disponible, el nivel medio de estrés laboral en directivos y gerentes de empresas en España se sitúa en esta cifra*. 

 

¿Son las vacaciones la solución?

Las vacaciones pueden ser consideradas como la panacea para desconectar y compensar los excesos del trabajo intenso continuado y del estrés del día a día. 

Pero sabemos que en el caso de los emprendedores y autónomos, cuando se toman un merecido descanso -si es que lo hacen-, casi nunca desconectan por completo del trabajo. 

Plantéate estas preguntas:

  • ¿Qué diferencia hay entre trabajar desde la oficina a trabajar desde una ciudad diferente o una tumbona? 
  • ¿Compensa hacer un viaje con todos sus gastos si lo único que vas a hacer es estar pendiente de la bandeja de entrada o de tener que resolver problemas por tu marcha? 
  • Y tan importante o más, ¿compensa que la gente con la que te vas de vacaciones, sean pareja, familia o amigos, acaben frustrados contigo porque una parte de ti se haya “quedado” en la oficina y esté continuamente pendiente del móvil? 

En esas condiciones, probablemente irte de vacaciones, esa gran esperanza de desconexión y cambio de aires, no solo no mejore tu situación, sino que tu ausencia se vea transformada en pesadilla a tu regreso: más cansancio, malhumor, tareas pendientes y problemas personales de los que te puedes permitir. 

Pero, lejos de desanimarte a tomarte ese descanso que anhelas, vamos a darte unas cuantas razones de peso y consejos para que no solo descanses, sino que ese descanso se vea traducido en algunas ventajas para tu negocio

 

¿Por qué tomar un descanso? 

Beneficios para tu salud

Si hablamos de salud física, las vacaciones no solo nos aportan un mejor sueño, sino que contribuyen a tener un corazón sano: diversos estudios Framingham, desarrollados durante muchos años, han llegado a asociar los problemas cardiovasculares con la gente que coge menos vacaciones (aunque una relación de causa-efecto directa es imposible de ratificar al 100% puesto que hay muchas otras variables).

Si hablamos de salud mental o psicológica, las ventajas son claras también: en una charla TED titulada “la ciencia de las vacaciones”, Ian Cole decía que tomar vacaciones es fundamental para la salud, porque 

  1. anticipas
  2. te relajas
  3. las aprovechas también a la vuelta (las sigues «saboreando» cada vez que las recuerdas o hablas de lo que has vivido en ellas)

Es decir, que irte de vacaciones te influye positivamente durante los días que descansas, pero también antes y después, y sabemos que más felicidad significa más salud.

Pero, si como emprendedor la mejora de tu salud no es una razón de peso suficiente, o piensas que la subida de ánimo es algo demasiado pasajero como para permitirte desconectar, a continuación te detallamos los beneficios que puede tener para tu empresa.

 

Beneficios para tu negocio

A cualquiera le hace bien escaparse una vez al año para cambiar de aires. No quiero estar en la situación de no poder ver el bosque por mirar muy de cerca los árboles. Franklin Roosevelt

Como te contábamos en otro post, en un momento en el que ya estamos viendo cómo las máquinas pueden sustituir a las personas en muchas tareas, la diferenciación, la creatividad y las habilidades transversales son y serán esenciales en un futuro cercano. Y las vacaciones te ayudan a ejercitar todo esto porque te hacen:

  1. Salir de tu zona de confort y asumir más riesgos, ver más oportunidades.
  2. Vencer la monotonía. Salir de la rutina activa nuevos circuitos cerebrales, aparca el piloto automático de tu vida que no te permite ver más allá.
  3. Relativizar. Ver la vida desde una perspectiva más global, algo que ayuda también a ver tu negocio en un sentido más amplio. 
  4. Mejorar tu networking. Puede que no veas la relación directa, pero pasar tiempo de calidad con familia o amigos mejora tus relaciones y aumenta endorfinas.  Cuanto más feliz seas en otros aspectos de tu vida, más cosas positivas proyectarás en tu trabajo, en tu equipo…, y conectarás con personas nuevas en el ámbito profesional de forma natural y beneficiosa.
  5. Mejorar tu estrategia. Traer nuevas ideas, productos, soluciones para pivotar o hacer cambios necesarios en la empresa que normalmente no llegan cuando tienes la mente ocupada o saturada con otros fuegos que apagar. Y es que los emprendedores también necesitan parones de vez en cuando para poder enfocarse en la estrategia. Y ya sabemos que esta es enemiga de las prisas del día a día.
  6. Generar nuevas ideas, ser más creativo. Conocer gente nueva, visitar lugares diferentes, calmar la sed de curiosidad e inquietudes que no tienes tiempo de realizar durante el año… Todo sirve de inspiración y te puede aportar ideas que a la larga resulten productivas para tu proyecto. Incluso te pueden ayudar a diversificar o establecer, sin darte cuenta, relaciones comerciales a la larga.  

Muchas nuevas ideas de negocio surgieron de viajes y de adentrarse en otros contextos. Es el caso de Blake Mycoskie, fundador de la conocida empresa de zapatillas TOM’s, cuya idea de negocio surgió de un viaje por Argentina. El tiempo sabático no le salió nada mal a este emprendedor que llegó en 2011 a estar en la lista “Fortune 40 under 40”.

 

Blake Mycoskie TOMs
Fuente: TOMS

 

Otro ejemplo es el diseñador Stefan Sagmeister, que en esta charla habla del poder del tiempo libre y de las ventajas que le reporta tomarse algo más que unas vacaciones -un período sabático cada 7 años-.

 

Consejos antes de irte

Planificar tu marcha será indispensable si quieres disfrutar de tus vacaciones sin que la vuelta sea un completo desastre. 

Los calendarios deben estar sincronizados con suficiente antelación y las tareas especificadas, si es necesario, para que todos tengan claro qué hacer. 

Según Lourdes Luceño Moreno, coordinadora del área de estrés laboral de la SEAS (Sociedad Española para el Estudio de la Ansiedad y el Estrés): 

«Si tenemos empleados, lo fundamental es confiar en nuestro equipo de trabajo y que ellos se ocupen de las tareas mientras nosotros estamos de vacaciones. Para ello, es fundamental formarlos adecuadamente para que tengan autonomía, y organizar el trabajo». 

La experta destaca, dentro de la organización del trabajo, un trabajo importante aún más previo: realizar el análisis de puestos de trabajo, evaluar las cargas de trabajo y gestionar el tiempo de forma correcta.

Si estás emprendiendo en solitario no vas a tener que hacer todo esto. «Si no tenemos empleados, no debemos dejar nada pendiente antes de irnos e informar a las personas que nos contactan de que estamos de vacaciones y hasta cuándo. Es fundamental programar el contestador y el correo electrónico», apunta. 

Estos trucos de la SEAS y alguno más en esta lista que no te debe faltar:

  1. Prepara una checklist con antelación. Anota las tareas importantes que tengan fecha límite y planifícate para tenerlas hechas antes de irte. Esto seguramente haga que tengas que trabajar más de la cuenta, pero cuanto antes lo tengas claro, mejor te organizarás, quizás sea cuestión de trabajar 20 minutos más todos los días, pero piensa que merece la pena.
  2. Delega tareas en el equipo, si es que lo tienes, hablando con ellos uno a uno y siendo consciente de su carga de trabajo. Y prioriza: si algo no necesita hacerse hasta dos semanas después de tu vuelta, no lo delegues y hazlo a tu regreso. Es importante que dejes números de teléfono y contactos, aplicaciones o documentos que puedan serles necesarios durante tu ausencia.
  3. Informa a tus contactos. Ya sean clientes, proveedores o stakeholders, evita que se lleven sorpresas desagradables y crearte una mala imagen.  Necesitarás decirles que te vas y quién se va a hacer cargo de cada aspecto del negocio para que se queden tranquilos.
  4. Llega a un acuerdo. Si eres emprendedor en solitario y no tienes equipo, puede que la mejor manera de que tu cliente no entre en pánico cuando le dices que te vas de vacaciones sea acordar un plan con él (cómo vas a compensar las horas, qué acciones vas a realizar a tu vuelta, etc.)
  5. Configura bien tus mensajes automáticos. Tómate tu tiempo para configurar tu mensaje/respuesta de fuera de oficina señalando que no vas a tener acceso a tu correo (o vas a tener acceso limitado, sobre todo si te vas a otros husos horarios). ¡No te olvides de hacer una prueba para ver que funciona!
  6. Deja tu trello o tu calendario preparado para la vuelta. Haz una lista con las cosas que tienes que hacer a tu regreso, para que la desconexión vacacional no haga que te olvides de alguna. 
  7. Recoge tu puesto de trabajo. Parece algo sin importancia, pero es conveniente que no te vayas de vacaciones sin despejar y recoger tu área de trabajo: cuando regreses agradecerás no encontrarte con un caos.

 

Consejos para evitar la pesadilla al regresar

Ian Cole en su charla da trucos sencillos como colocar fotos de tus vacaciones en la pared de la oficina o de la casa, o traer algo que puedas compartir (como por ejemplo una botella de vino, o unos dulces típicos) que más adelante, en un potencial momento de estrés, puedas abrir con amigos y te ayude a desconectar por unas horas rememorando las vacaciones.

Reincorporarte al trabajo poco a poco y a ser posible empezar por las tareas más gratas, o al menos alternándolas con otras que no te gusten pero necesites sacar adelante.

Ciertos consejos de los que nos habla también la SEAS y que sirven para todo el año -no solo cuando te vas de vacaciones- son:

  1. Aprender a gestionar bien tu tiempo. Si estableces horarios y te organizas correctamente, seleccionando lo fundamental en caso de saturación, evitarás sobresaltos, olvidos y preocupaciones.
  2. No analizar continuamente los problemas o las alternativas: esto produce ansiedad. Cuando entramos en bucle y no dejamos de pensar en algo, a veces podemos acabar exagerando las consecuencias negativas.
  3. Reforzar las conductas positivas de las personas de nuestro entorno, con aprobación, halagos, sonrisas, pequeños detalles, etc.
  4. Corregir las conductas negativas de las personas de nuestro entorno, dándoles la información o nuestra desaprobación a tiempo, pero sin culpas, castigos y con educación y empatía.
  5. Practicar técnicas de relajación, mindfulness, hobbies o actividades que nos hagan desconectar de la rutina y centrarnos en otra cosa, dedicándonos tiempo a nosotros mismos.
  6. Aprovechar los momentos de descanso, como el de la comida, por ejemplo, para hacer vida social y familiar.
  7. Dormir lo suficiente.
  8. Dejar el trabajo en la oficina (tanto los papeles, como las preocupaciones).
  9. Practicar algún deporte o ejercicio físico.

 

Si necesitas desconectar y no sabes cómo, habla con otros emprendedores que sí se toman vacaciones para conseguir ideas e inspirarte.

Ten en cuenta que si eres una startup en sus primeros días, muy probablemente tendrás que posponer esas vacaciones al momento en que tengas cierto colchón económico y algo que ya esté funcionando. 

Eso sí, los emprendedores no distan mucho de los trabajadores por cuenta ajena en algo: procurarán irse de vacaciones en aquellos momentos del año con menos carga de trabajo.

En definitiva: no necesitas viajar a las antípodas para tener un buen período estival y desconectar pero, si te vas, que tu tiempo de ocio sea, parafraseando a Ian Cole, como el amor: que lo anticipes con placer, tengas una experiencia no del todo agradable pero lo recuerdes con nostalgia.

Y tú, ¿qué trucos tienes para poder desconectar?

*Últimos datos disponibles del INE. Esta cifra incluye información de ambos sexos y se refiere a los siguientes grupos:
I. Directores/as y gerentes de establecimientos de 10 o más asalariados/as y profesionales tradicionalmente asociados/as a licenciaturas universitarias
II. Directores/as y gerentes de establecimientos de menos de 10 asalariados/as, profesionales tradicionalmente asociados/ as a diplomaturas universitarias y otros/as profesionales de apoyo técnico. Deportistas y artistas
III. Ocupaciones intermedias y trabajadores/as por cuenta propia
La cifra de estrés del grupo III es ligeramente inferior a la media de los tres grupos: se sitúa en el 4,43.